Nota del editor: Para celebrar el Mes de la Herencia Hispana, el Herald presenta Young Latin Voices, perfiles de algunos de los propietarios de negocios latinos de Peekskill.

En el 2015, mientras salía de compras con su madre, Evelyn Romero recibió una llamada que cambiaría su vida. Joseph Lippolis, corredor y copropietario, junto con su esposa Cynthia, le ofreció un trabajo en el acto en la franquicia Berkshire Hathaway HomeServices River Towns Real Estate en Peekskill y Croton.

Lippolis quería que Romero fuera la administradora de la empresa de las franquicias de Peekskill y Croton. Romero infiere que le llamó la atención a Cynthia y a Joe por su trabajo voluntario en la Cámara de Comercio de Hudson Valley Gateway. Durante ocho años, Romero trabajó como voluntaria en Hudson Valley Gateway Young Professionals organizando eventos de networking, educativos y de servicio para jóvenes profesionales.

Administradora de una empresa a tiempo completo para una franquicia de corretaje de bienes raíces, agente de bienes raíces a tiempo parcial y ahora propietaria de un negocio por primera vez, Romero, residente de toda la vida de Peekskill, es un ejemplo de lo que el trabajo arduo y la dedicación pueden brindarle. Con su profundo conocimiento de Peekskill y las ciudades circundantes, Romero ha disfrutado de cierto éxito en sus tres años trabajando como agente de bienes raíces. Pero el trabajo de Romero en Peekskill va más allá de la venta de propiedades. En agosto, Romero y su esposo hicieron realidad su sueño de tener un negocio juntos cuando abrieron su establecimiento de limpieza seca de ropa en Crompond Road en Peekskill.

Romero, de 31 años, nació y creció en Peekskill de padres ecuatorianos que emigraron a los Estados Unidos hace casi 40 años. Después de graduarse de Peekskill High School en 2010, Romero asistió a SUNY Buffalo: “Siempre quise estar en el área de negocios y ser una empresaria. Por eso elegí Buffalo porque ofrecen un poco de todo en caso de que hubiera decidido cambiar de opinión”. Romero se graduó de SUNY Buffalo en el 2014 con un B.A. en Estudios Internacionales, lo cual incluía negocios internacionales, comercio mundial, y una especialización en geografía. En la universidad, combinó estos dos intereses realizando un semestre en el extranjero, viajando a Madrid para estudiar mercadeo en la Universidad Francisco de Vitoria.

Al notar que las oportunidades laborales en Buffalo no pagaban tan bien como pensaba, Romero regresó a Peekskill en el 2014, después de terminar la universidad. Romero pronto fue contratada en The Mansion at Colonial Terrace en Cortlandt como gerente de banquetes. Desde entonces, el negocio ha cerrado. Mientras construía conexiones en la ciudad, Kish Melwani (CEO de ServiceByte) se acercó a Romero para unirse a Hudson Valley Young Professionals, la cual es parte de la Cámara de Comercio del Hudson Valley Gateway. En sus ocho años en la organización, Romero se desempeñaría como presidenta, un puesto voluntario, para ayudar a personas con ideas afines a conectarse para crecer tanto personal como profesionalmente. “Siempre me ha gustado el voluntarismo, eso es algo que me enseñó mi mamá cuando era pequeña. Mantente humilde y contribuye. Lo hice durante la secundaria y la universidad y pensé que podía seguir haciéndolo.” Se retiró del Hudson Valley Young Professionals en el 2022 y le dijo al Herald que estaba agradecida por la oportunidad pero que quería concentrarse en su trabajo y en su esposo, Fredy Alonzo.

En el 2015, después de sólo un año como voluntaria en el Hudson Valley Young Professionals, Romero recibió la llamada de Lippolis. “Fue súper emocionante”, dijo Romero. “Pensé: ‘¡Guau, mi nombre está saliendo a la luz!”. Aprovechó la oportunidad debido a la proximidad de la franquicia de Peekskill. “Aproveché la oportunidad y aquí estoy, casi nueve años después”, se rió Romero.

El puesto de Romero incluye trabajar como director de mercadeo, gerente de cuentas de clientes, coordinadora de referencias y de capacitación de agentes, asistente de corredor y más. A través de estas experiencias prácticas, Romero ha aprendido todo lo que tiene que ver con el mercadeo y las ventas de bienes raíces, lo que según ella, beneficia a sus clientes a la hora de tomar decisiones.

Justo antes de que comenzara la pandemia en el 2020, Romero adquirió su licencia de bienes raíces en Nueva York. Romero tuvo que completar 75 horas de cursos de bienes raíces, aprobar un examen al final del curso y aprobar el examen de bienes raíces del estado de Nueva York para adquirir su licencia, que está patrocinada por Berkshire Hathaway HomeServices. Desde el 2020, Romero ha trabajado a tiempo completo como administradora de empresas, cerrando propiedades como agente inmobiliario independiente. La jornada laboral de Romero normalmente comienza a las 9 a.m. y termina a las 5 p.m. pero le dijo al Herald que ocasionalmente muestra propiedades antes y después de su trabajo habitual de tiempo completo, lo que puede ser que comience a las 7 a.m. y termine a las 8 p.m.

Durante la pandemia, Romero y sus asociados todavía administraban las oficinas de Peekskill y Croton, comunicándose principalmente a través de llamadas de Zoom para mantener a los agentes involucrados en las tareas inmobiliarias cotidianas. Romero recordó las dificultades que enfrentaron los agentes inmobiliarios durante los peores momentos de la pandemia: “Para los agentes fue difícil porque no podían entrar a las casas. A veces, los propietarios solo permitían que la gente entrara después de que estuviera vacío. No podías entrar con tus clientes”. Se dio cuenta de que una vez que las tasas de interés cayeron después de la pandemia, muchas personas querían mudarse de Nueva York al norte de Westchester.

La primera venta de Romero se produjo a finales de junio de 2021, en Peekskill, para una pareja hispana. La pareja se comunicó con Romero después de ver su página en línea y pensó que ella era la opción perfecta para ellos después de darse cuenta de que es nativa de Peekskill y bilingüe. “Creo que siempre es bueno estar con alguien local, que conoce un poco mejor el área”, dijo Romero. También señaló que un agente de bienes raíces que habla español tiene una ventaja adicional. “Gran parte de la comunidad es hispana”, dijo Romero. “Al crecer en Peekskill, he visto un aumento en las cifras. Estoy muy agradecida de que mi mamá me enseñó español porque me ha ayudado mucho desde que era joven hasta donde estoy ahora”.

Aunque fue su primera venta, Romero recordó sentirse segura y imperturbable: “Sabía cómo funcionaban las cosas. Estuve seis años en el campo inmobiliario.”

Para cualquiera que desee convertirse en agente de bienes raíces, Romero compartió algunos consejos. “Se trata de promocionarse frente a la comunidad”, dijo Romero. “Necesitas algunas habilidades interpersonales y paciencia. Puede cerrar un trato después de una visita un día o puede cerrar un trato después de un año entero. Siempre tenga una reserva porque, como contratista independiente, está pagando de su propio bolsillo el transporte del punto A al punto B. También debe tener algún tipo de reserva porque está pagando sus cuotas de la MLS, su nacional cuotas, tus cuotas de oficina. Mi consejo es que estés preparado para saltar, pero asegúrate de tener un poco de reserva”, añadió Romero.

Romero y su esposo Fredy Alonzo se incorporaron recientemente a su nuevo negocio, “202 Clothesline”, una tintorería y entrega de ropa sucia, que abrió en agosto.

Alonzo, que trabaja como paisajista, tiene experiencia previa trabajando en una tintorería en Shrub Oak. Romero continúa trabajando en un horario riguroso que equilibra dos trabajos, su vida familiar y, ahora, sus deberes de nueva propietaria. “Algunos podrían pensar que es una idea totalmente aleatoria en comparación con el sector inmobiliario, pero no para nosotros”, dijo Romero. Romero espera utilizar su experiencia en marketing para impulsar su negocio: “La experiencia de mi marido con la tintorería más mi experiencia en marketing: ¡es nuestro nuevo bebé!”

-30-